Segunda tanda de test. Análisis de un aficionado (II).

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Si en la primera tanda de tests nos fijábamos en las carácterísticas de los morros, los sonidos de los V6T y la fiabilidad, la segunda tanda de test también deja cosas que comentar desde nuestro humilde punto de vista. En este caso, y con todo lo que se ha comentado ya de los morros, los sonidos y la fiabilidad, vamos a centrarnos en la ventaja de los equipos motoristas (principalmente Mercedes GP y Ferrari), los problemas de Red Bull (que no Renault) y la postura de algún piloto. Vamos a ello.

Equipos motoristas: ¿con ventaja o no?

Este año tenemos nada más que tres motores en pista: Renault, Mercedes y Ferrari. Si bien la aventura de Cosworth no ha salido bien, dejando de nuevo la F1, hay otro motorista que ya sabemos que volverá en 2015: Honda. De la mano de McLaren. Pero si este año vuelven los motores turbo, lo cierto es que hay dos de ellos que llevan ventaja, como podría parecer.

Los de Maranello parecen haber hecho un gran trabajo. La ventaja, igual que en el caso de Mercedes, está en que ellos mismos son los fabricantes. Mucho tiempo de desarrollo y un sistema de refrigeración que parece ser más eficaz, es la ventaja del motor Ferrari para la nueva era turbo. Un apunte: en velocidad pura, en recta, es el motor de los del Cavalino Rampante el que ha dado la punta más alta: 336 km/h a las manos de Fernando Alonso. No sólo eso, sino que el desarrollo les ha llevado a ahorrar hasta tres kilos en el peso del motor.

En cuanto a los alemanes, la fiabilidad es su punto fuerte. A pesar de que han tenido problemas, exactamente igual que el resto de escuderías, sus programas no se han visto afectados en lo más mínimo y ya los hemos visto hacer simulaciones de carrera y buscando la optimización del setup. Que en esta última tanda hayan puesto el mejor tiempo en todas las sesiones (hablamos del motor, recordad) ya nos indica lo fuertes que están. De nuevo los motores Mercedes se van a hacer con el "título" de mejor motor de la parrilla.

Sin embargo, no hay que restarles sus puntos débiles. En ambas escuderías enseña (Ferrari y Mercedes GP) han tenido problemas. Hemos visto problemas con la caja de cambios, la telemetría y el nuevo sistema de frenos. ¿Problemas menores? No tanto. La telemetría es una herramienta indispensable no sólo para el piloto, sino para el control desde el muro, que puede asegurar la superación de los problemas en carrera. La caja de cambios no vamos ni a comentarla. Y el sistema de frenos, siendo nuevo, llevará tiempo ponerlo a punto del todo, pero la eficacia de frenada va a ser indispensable para poder poner puerta a los nuevos motores turbo. Y a esto hay que unirle el desarrollo aerodinámico. En el caso de Ferrari, todos sabemos que van muy por detrás. Han perdido al menos los últimos cuatro años con un túnel de viento que no funcionaba bien. Para Mercedes GP la cosa es distinta. Su desarrollo aerodinámico está mucho más avanzado y podrían llegar a Australia con todo atado y bien atado.

Esta semana, Ferrari empezará sus setups y sus ajustes. Esta semana Mercedes GP se pondrá las pilas para llegar con todo hecho. ¿Y Renault? Pues al no ser ya un equipo motorista y no existir como tal y sólo ser suministrador, sí podemos contarlo en desventaja. Ferrari y Mercedes GP deben servir el mismo motor que montan y no pueden arriesgarse a tener motores de peor rendimiento y buscar después la ganancia en otro lado. Pero Renault tiene que desarrollar para cuatro escuderías. Y seguramente ninguna se ponga de acuerdo en lo que quiere. Sacar un motor y luego esperar que todos se adapten a él sería lo lógico. Pero ninguno quiere hacerlo: todos quieren un motor para ellos.

Esto, aparte de los problemas que hemos visto (Red Bull tiene unos problemas más que evidentes), genera quejas. La unidad de potencia de Ferrari, con sus tres kilos menos ha propiciado que los de la bebida energética se quejen de la seguridad de dicho motor. Una tapa es el centro de la polémica a la que, aprovechando la coyuntura, se ha unido Mercedes. Dicha tapa pesa tres kilos más en los otros dos motoristas. Pero Ferrari ha conseguido que dicha tapa pese muchísimo menos. Este asunto a mi me genera dudas. ¿De verdad una tapa pesa, cuando menos, cuatro kilos? ¿En un deporte en que los pesos son tan importantes? Y el asunto es "por seguridad". Señores, piénsenlo un poco. Si realmente fuera inseguro, ¿se habría dado el visto bueno para ir a los tests?

Red Bull y su catástrofe

Esto es complejo. Recapitulemos.

En el periodo de pretemporada que llevamos solo les hemos visto rodar un día en condiciones, con Vettel al volante. 59 vueltas. Pero tras haber ilusionado con esa jornada de test sin problemas, volvieron a las andadas. No son capaces de levantar cabeza ni pueden rodar sin problemas.

Ya se comenta que Adrian Newey está desarrollando una versión B del RB10. Pero según esos mismos rumores, se apunta que no estará listo hasta el GP de España, allá por mayo. Según los peores augurios, esto podría suponer una desventaja enorme para los actuales campeones del mundo, que podrían estar hasta 172 puntos por detrás, en caso de que no puntuaran en las cuatro primeras carreras y un sólo equipo se hartara de firmar dobletes.

¿Cuál es el problema de Red Bull? En este caso, Renault y Red Bull se pasan la pelota el uno al otro. Red Bull dice que son problemas en la unidad de potencia de la marca Francesa, pero Renault dice que el retraso se debe a lo pijoteros que se ponen los de Milton Keynes. La verdad, sospechamos, estará a medio camino entre uno y otro. Pero nosotros inclinamos la balanza de la culpa más hacia los austriacos. ¿Por qué decimos esto? Pues porque el E22, el nuevo bólido de Lotus y que monta la misma unidad de potencia parece estar funcionando como debe. Ni Maldonado ni Grosjean se han quejado, alaban lo bien terminado que está y presumo que esta nueva semana de tests nos darán alguna sorpresa.

Las alarmas se han encendido en Red Bull. Pero ¿son reales? Algo nos inclina a pensar que no, pero no queremos descartar nada. Esperaremos.

La actitud de algunos pilotos

Y es que empiezo a estar harto de muchos que se creen divas.

El mejor ejemplo es Raikonnen. El viernes, con sus dos cojones, se bajó del coche porque estaba incómodo en el asiento. Luego se intentó minimizar la cosa con errores de telemetría y tal. Bien. Señores de Ferrari y señor Raikonnen... no nos tomen por idiotas. Podemos llegar a creernos que hubiera problemas con la telemetría del monoplaza, como ya hubo la primera semana. Pero el coche no está fuera de servicio durante tantísimo tiempo. Nunca. ¿Qué creemos nosotros? Que el asiento fue la causa de que Kimi no quisiera subirse al coche.

No me puedo creer que un asiento, que se tarda en preparar y en terminar, que se hace a medida y del que se hacen varios para que luego el piloto se encuentre con el más cómodo, sea el causante del parón. Sin embargo, sí me creo que Kimi no quisiera subirse al asiento. A mí me van ustedes a perdonar si digo que a cualquier otro trabajador que se pasa horas sentado en un cubículo, en una silla incómoda, va a la puta calle si dedide abandonar su puesto de trabajo porque está incómodo en su silla. Sí, Kimi está encajonado en su puesto de trabajo y tiene que estar lo más cómodo posible; sí, Kimi está recién operado y la espalda le puede estar dando guerra. Pero si es esto último, Ferrari tiene pilotos de prueba cojonudos como para detener todo el programa por una chorrada. Hubiera bastado con comunicarlo a la Scuderia: "¿Oiga? ¿Stefano? Sí, soy Kimi. Mira, que todavía no estoy para coger el coche, que tengo la espalda hecha un cromo". Pero lo que ocurrió fue que al finlandés le apetecía estar en pista, hacerse con los mandos y dar vueltas (algo totalmente legítimo, como no). Pero como el señorito no estaba como en Hawaii en una tumbona con un mojito, decidió que Ferrari ese día no terminaba su programa porque a él se le puso en sus cojones morenos.

Si eres un trabajador, eres un trabajador. Si temes por tu integridad y no estás bien, no te subas al coche. Y si sospechas que vas a tener problemas en tu puesto, comunícalo antes para poder solucionarlo. Pero no puedes detener todo el trabajo del resto de tu empresa porque a tí se te pone en los morros.

Conclusiones

Esta semana de tests me ha dejado con un sabor de boca muy amargo. Ante la comunicación de que en España verla será de pago a partir de 2016, dejándonos huérfanos a los aficionados que no podamos costeárnosla, y los llantos que hemos visto por parte de unos y de otros, nos estamos planteando dejar de ver la F1. La F1 ha dejado de ser un deporte de motor en el que tíos con los huevos más gordos que el resto se subían a máquinas desbocadas a velocidades imposibles por ver quién era el que la llevaba más rápido a la meta para ser un espectáculo de llorones en el que la señora que más alto chilla es la que se lleva el gato al agua.

Señores, los aficionados somos el alma de este deporte. No se rían de nosotros. Los cambios en las regulaciones, las normas, los motores, etc., nos dan igual siempre y cuando podamos disfrutar de las carreras y rompernos la cabeza con el "¿qué habrán hecho para ir un segundo más rápido que el resto?". Pero se nos hace muy difícil disfrutar de nada cuando todo son quejas por el "éste ha hecho mejor trabajo que yo, tiene que ser ilegal" o "no me gusta el color del número que me habéis puesto".

Deporte. Competición. Velocidad. No más llantos, coño.