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jueves, 24 de junio de 2010

A escape

Como ya sabemos todos, lo de Red Bull no tiene nombre. Sí, no lo tiene. O bueno, sí. Se llama Adrian Newey. Pero lo que nadie (o al menos yo) nos esperábamos era que esta escudería llegara tan alto en los 6 años que lleva en la F1. Ya el año pasado apuntó maneras y este se está confirmando. Claro, que se confirmaría más de tener una mejor mecánica, claro. Y encima, Marko ha renunciado a la mecánica Mercedes. ¿Cambiarán a Cosworth? No, van a mantener Renault. Insólito.


Pero no hemos venido aquí a eso, sino a comentar lo que TODOS los equipos están haciendo ya. Los escapes del RB6. En la pretemporada, nadie pareció darse cuenta gracias a la triquiñuela de las pegatinas. Así, Newey había puesto una especie de calcomanías en el sitio donde normalmente están puestas las toberas de salida, ocultando así que sus escapes 'soplaban bajo'.


Si os fijáis en la foto, junto a la rueda rsera, detrás de la publicidad del Speed Week y Bridgestone, y bajo la pata trasera del toro, hay una zona negra. Pegad la vista ahí. Bien. ¿Dónde está el escape? Cuando hay tíos corriendo a 300 km/h en una pista de entrenamientos, nadie se fija. Hasta que salta una foto como esta o un listo ve como unos papelillos que habia en el suelo volaban sin razón aparente. Así, si os fijáis de nuevo en esa zona negra veréis que la parte superior (justo bajo la pata del toro) no es más que un truco. El escape real está más abajo. Esto es lo que todo el mundo ahora piensa que es la baza del RB6. Por lo visto, los que entienden de esto, dicen que el aire caliente que expulsan las toberas optimiza el rendimiento del difusor, por lo que mejoraría el rendimiento global del monoplaza.

Y, a pesar de ello, lo que más se ha copiado es el maldito 'F-duct'. Pues bien, ahora que el conductito de marras está más o menos dominado por unos y por otros y quien más y quien menos le tiene cogido el tranquillo, es hora de pasar a lo siguiente.

Así, por ejemplo, nos hemos enterado esta semana de que Fernando Alonso, en un acto promocional, ha probado el F10B en Fiorano. Con dicha prueba, los de Maranello confirmaban que se ha adaptado el chasis del coche para alojar unos escapes que soplan por debajo. ¿El objetivo? Alcanzar de una vez por todas a los de azul y los de plata. Van a estrenarlos en Valencia, donde esperan estar a la altura de lo que hicieran en Canadá. Y, por lo que se ve, el rendimiento de estas toberas colocadas más abajo, es bastante bueno.

Esto es lo que, junto con una aerodinámica mejorada, trae el F10B (y algo más que seguro iremos viendo a partir de mañana; nunca se enseñan todas las cartas antes de jugar). El paquete de cambios incluye una nueva suspensión trasera (la anterior sufría mucho con los humos y la temperatura a la que soplaban los escapes); quizá la pull-rod, como hace Red Bull:

Si bien es cierto que la push-rod, en el circulito, es más robusta, la pull-rod permite una mejor distribución del flujo de aire y una bajada del cuerpo del monoplaza, con lo que se consigue una mejor estabilidad aerodinámica y, con ello, una mayor velocidad y un mejor agarre en curvas. Si Ferrari, que ya tiene cogido el F-duct, consigue aplicar esto con eficiencia, es posible que consiga auparse a donde no ha llegado aún. ¿Problema? Ahora desgastará más neumático por el calor de los escapes. A Massa igual le viene hasta bien: ahora conseguirá calentar el neumático antes.

Obviando que el desgaste de neumático podría elevarse (que no lo sé, ojo, es una conjetura), a Ferrari su mejora le podría durar sólo un Gran Premio. Mercedes y Renault ya han anunciado que lo copiarán y que lo tendrán listo, casi con toda seguridad, para Alemania, dentro de un mes. Pero los chicos de Woking, que son mucho más aplicados, van a llevarlo a Silverstone en quince días. Y, por delante de ellos, Williams, que también los estrenarán mañana en Valencia.

Ahora todos los equipos quieren ser como Red Bull. Lógico. Pero muchos equipos deberían pensar si les conviene o no serlo. Red Bull está teniendo serios problemas mecánicos en muchas carreras que podrían estar determinados por su sistema de escape-suspensión. No puedo asegurarlo, de nuevo, no soy ingeniero ni nada parecido, pero creo que muchas de las averías que ha sufrido el RB6 podrían venir dadas por un diseño similar. El calor ahora se acumulará debajo del coche, potenciado por el efecto del difusor. Aunque el flujo de aire a este aumente, también lo hará la temperatura y eso podría dañar, presumiblemente, algún elemento mecánico.

En fin, ya veremos si es como digo yo, o me estoy adelantando o qué es lo que ocurre.

PD: le he lavado la cara al blog, sí. Estaba un poco sosete. Y esto no es más que el principio. En algún momento cambiaré el fondo y algunas cosillas más. Disfrutad de la nueva apariencia.

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